El Laboratorio Creativo, que inicia su siguiente edición, es un curso-taller cuya meta es sentar bases para el desarrollo de una labor creativa, con la lectura como base y el diálogo textual como herramienta. El concepto es un “Laboratorio textual/creativo” que, partiendo del diálogo con creaciones propias y ajenas, sirva para “sanar textos heridos” y, sobre todo, ayude a desarrollar herramientas para la “curación de textos”, usando la palabra curación en toda la amplitud de su polisemia (como “medicina” y como “museística”).

 

¿Sentir lo que se piensa, pensar lo que se lee, contar lo que se siente no es lo que tenemos en mente cuando nos ponemos ante un papel en blanco (aunque el papel sea virtual)?

 

Por eso, en el laboratorio, se intenta que el proceso “leo, pienso, siento, escribo, leo” sea un mantra, un leitmotiv. Por cierto, después de varias ediciones, algunas alumnas y alumnos de ediciones anteriores siguen en un Laboratorio Permanente: una vez a la semana leen y se leen, escriben y se escriben... Cultivan la amistad a través de la literatura. No es poca cosa.